Akio se fija en el auto menos pensando cuando va a un basurero de autos. No solo el dueño anterior de ese Fairlady S30Z tiene su mismo nombre, sino que tanto ese dueño como el anterior han sufrido accidentes culpa de ese auto, conocido entre los corredores de la autopista Wangan como el “Demonio Z”.
La historia se centra en la lucha de Akio por demostrarle a la hermana del difunto anterior dueño del auto, Eriko, y al novio de esta, Tatsuya, que ese auto no es un demonio y que esa muerte fue a causa de su propio error.
Pero, ¿qué sucede cuando todo parece que sí es obra de ese auto?
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